El guardameta de la UD Las Palmas concedió una entrevista a La Provincia / DLP en la que explicó cómo se encuentra el equipo tras los malos resultados y lo que espera conseguir en las próximas semanas. Además, relató cómo debe afrontar el vestuario esta situación y habló de su famosa rajada tras caer de forma muy dolorosa en el Nuevo Arcángel de Córdoba.
Voz autorizada. Raúl Fernández se ha convertido en uno de los mejores portavoces de la UD en los últimos tiempos por su sinceridad y claridad a la hora de dar la cara. Quizás, por eso en una entrevista en el periódico La Provincia no dudó en hablar de aquella rajada tras el partido ante el Córdoba en la ciudad califa argumentando que era un momento de «pensar en Las Palmas. Al ser una plantilla tan grande, es difícil. Pero en este nuevo ciclo de 2019 se percibe más claridad en las ideas. Lo más importante ahora es que estemos todos unidos, que tiremos para el mismo lado».
Aun así, volvió a recalcar la importancia que tiene el compromiso con la UD al señalar que los jugadores han de «estar aquí con todas las garantías del mundo jueguen o no. Como si te toca ir a la grada, siempre puedes ayudar al equipo. Así me han inculcado el fútbol. Y ahora es cuando hay que ver al futbolista que tiene hambre, que tiene ganas, que siente el escudo y que da la cara en los momentos difíciles».
Quizás, por esas palabras se entiende que el vasco no contemple ni pueda comprender que se piense en la destitución de Paco Herrera, alegando que el equipo debe «seguir el mismo camino, y no desbarajustar esto más. Si viene otro técnico habría que reajustar todo otra vez. Sería el tercero, empezar de cero… Tenemos que seguir esta línea. Ahora el equipo va cogiendo conceptos y tampoco ha sido fácil para el míster. Ha tenido que buscar soluciones, ver lo que encaja y lo que no».
Además, hace un poco suyas las palabras del propio técnico catalán a la hora de hablar de que para hacer funcionar esto hace falta tiempo: «En el fútbol el tiempo apremia y Paco ya va dando con la tecla de lo que nos va conociendo. Trata de sacar el mayor potencial de cada uno y está cerca de ver el equipo que queremos».
El empate en Madrid y la humildad como dogma
En otro orden de cosas, para valorar el punto cosechado en el Cerro del Espino el pasado lunes, Raúl argumentó lo importante que es dejar la portería a cero y que el equipo tome cierto equilibrio entre su versión tanto de local como de visitante. En ese sentido, declaró que es importante «dejar la portería a cero tras dos meses sin poder hacerlo lejos de casa. Veníamos de recibir mucho y era cuestión de concienciarnos para sacar los puntos fuera de casa. En casa se competía bien, por unas cosas u otras, no se ganaba. Si no era por el árbitro era por ciertas dificultades. El equipo comienza a ser el mismo, dentro que fuera; queremos que el equipo sea reconocible».
Continuando con esa línea, el meta bilbaíno dejó claro que para empezar a levantar el vuelo hay que dejar atrás la presión, aclarando que si el equipo se «suelta un poco, si nos quitamos esa losa, disfrutaremos. Estamos atenazados por las circunstancias y todo cuesta un poco más: meter un gol, dar un pase…».
A pesar de ello, confía plenamente en las posibilidades de esta UD y relató que, para crecer como conjunto, la humildad es clave: Ni somos tan buenos, ni tan malos. Hay un término medio. Desde la humildad, el equipo debe crecer mucho. Hay equipo, hay jugadores, hay hambre. La clave es volver a la humildad. Debemos ir cada uno a sus orígenes, pensar en lo que ha nos ha costado llegar aquí. Desde la humildad hay que sacar puntos. El equipo está preparado», finalizó. .