Manolo Jiménez se marcha descontento del Molinón por la derrota de su equipo ante un Sporting al que no quiso restarle mérito, aunque sí que señaló que los suyos no fueron peores que los asturianos. Además, señaló que faltó criterio a la hora de ir a buscar el empate y evitó hablar del árbitro.
Su valoración de la derrota y un error asumido por el técnico. «No he visto al Sporting de Gijón superior. Al minuto 29 no estaba nada contento El Molinón. El control era nuestro y llego la fatídica jugada del gol, precedido de un fuera de juego clarísimo. Una falta de concentración posterior que no debe pasar nunca».
El equipo debe mejorar las llegadas. «En los últimos minutos hemos hecho el fútbol que ellos querían con pelotazos frontales, cuando los centros deben llegar desde las bandas. Debemos mejorar muchas cosas. Se nos han escapado puntos porque no hemos sido inferiores. No hemos sabido finiquitar las aproximaciones que hemos tenido y en el tackle, cuando no la ganaba el Sporting, pitaba falta el árbitro».
El antes y después del gol de Álvaro Jiménez. «Ellos al meter el gol se metieron atrás y empezaron a confiar. Para ellos era un partido peligroso porque si nos poníamos por delante podíamos haberle generado dudas. Antes del gol tuvimos una ocasión de Tana que podría haber sido importante sólo con rematar. El partido ha estado cargado de faltas y con un exceso de faltas innecesario».
¿Ha faltado pólvora? «No nos ha faltado presencia, sino tomar las decisiones correctas. Hemos centrado mucho, pero nos ha faltado contundencia a la hora de rematar. También nos ha faltado presencia con el balón. Con cuatro puntas ya porque no nos quedaba otra ellos hicieron muchas contras, pero con el 0-0 hemos sido mejores».
Equivocados a la hora de atacar. «Hemos sacado toda la pólvora y a veces no es cuestión de sacar a todos los delanteros. Nos hemos buscado transición, no hemos buscado llegadas por banda… Nos hemos precipitado y nos hemos equivocado, pero aquí no hay tiempos muertos».
Prefiere no hablar del árbitro por el ambiente del estadio. «No quiero hablar del árbitro porque pitar en El Molinón es muy difícil».
