Tras el empate cosechado contra el Xerez, el técnico de Las Alcaravaneras ha reconocido que los jugadores «han salido triste porque no hemos ganado el partido» a pesar de que «lo hemos intentado de todas las maneras».
Analizando el encuentro, comentó que «hemos tenido fases buenas» aunque el equipo grancanario «no ha estado acertado en el remate» y además «el portero ha sacado dos o tres» buenos disparos. Además, destacó que también había que tener cierta cautela ofensiva porque en «este tipo de partidos, ocurre que siempre llega un momento determinante que en cualquier jugada fuera de lugar, el contrario acierta en una jugada y se te puede quedar cara de bobo».
De todas formas, reconoció que el equipo «no ha hecho un buen buen partido» aunque al mismo tiempo «ha tenido ocasiones y llegadas» para conseguir la victoria, que de hecho «hemos podido conseguir», algo que no se pudo hacer por la falta de acierto de cara a la portería.
Todo hubiera cambiado si Daniel Ocón Arraiz pita un penalti sobre Jonathan Viera: «Qué me va a parecer a mí, no comento», explicó Juan Manuel Rodríguezen la rueda de prensa sobre esta decisión del colegiado, al cual se «dirigió al descanso para decirle que se calmara un poco», como los jugadores.
Evidentemente, el técnico grancanario no salió contento con el árbitro riojano ya que «condicionó» al equipo amarillo en defensa, porque «se te va a escapar un adversario y no podemos pararlo», por lo que opina que «las tarjetas deben ser por otras cosas» y no por protestar, poniendo como ejemplo dos manos de un jugador xerecista que no fueron sancionadas con amarilla.
Lo mejor del partido, sin duda, es que la Unión Deportiva Las Palmas ha vuelto a dejar la portería a cero, destacando otra vez la importancia de este hecho: «El Hércules tiene seis goles en contra», expuso el de Las Alcaravaneras, que tiene claro que «mientras mejor estés en defensa, podrás tener la recompensa de ganar un partido».
Para acabar, y cuestionado por Vitolo, que salió cabreado al ser sustituido e incluso le negó el saludo a Juan Manuel Rodríguez, explicó que «el pibe está fastidiado porque no le salen las cosas como él quiere» y es que «le está costando» volver a ser el que era porque «la competitividad es demasiado fuerte y entonces el nivel de exigencia es demasiado grande», concluyó el grancanario.
